Contra la pared.
El reloj marca las 23:12!
Mi chaparra se levanta de la cama para ir a su rutinaria visita al baño, pero esta vez regreso más rápido que un niño espantado, se acuesta en la cama y me dice: "me siento muy mal, estoy muy mareada"
Me levanto de la cama como resorte y me dispongo a hacer lo necesario para ayudarla, le pongo el monitor de presión y después de unos 15 segundos, marca 59/39, le tomo el pulso y cuento 44 pulsaciones por minuto! A Chinga!!!!
En ese momento, se detiene el tiempo, la mente empieza a hacer las rutas de análisis, valoraciones de los próximos minutos y ponderaciones de la gravedad del tema.
Le marco a los médicos, primero a uno luego al otro, entre todos hacemos un plan de acción, el cual consta de dos etapas:
La primera consistía en esperar 20 minutos, piernas levantadas y un sabroso pedialite, el objetivo de éste era que sus signos empezaran a repuntar hacia Canadá!
El segundo, esperar 30 minutos después y la FC deberá estar arriba de 70.
En el caso de que ninguno de los 2 intervalos funcionen, la instrucción era muy clara:
"cargada a urgencias"
Primer intervalo, un éxito!
Segundo intervalo, éxito moderado, el mareo desaparece pero la FC llega solamente a 60, hablo con los especialista y por esta vez, nos salvamos, ya pasó el peligro y nos quedamos en casa.
Ella, cae dormida!
Sabado 10:00am, llamadas con los médicos para el recuento de daños!
Todo sigue su curso y el plan a seguir se mantiene!
La definición unanime: Fue el susto de la vida, para ellos y para nosotros.
La conclusión final fue: Ya estamos contra la pared, urge hacer algo!
Así pasaron las últimas 12 horas, yo perdí 20 años de vida, pero hoy estamos contentos, mis hijos ni luz se dieron y hoy será un gran sábado!!!
Todo lo que no te mata, te hace más fuerte!
Live, Love, Laugh.
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