El cansancio mas rico del mundo.

Hay días en la vida que te dejan marcado, momentos que te hacen cambiar e instantes que hacen que ya no seas la misma persona que eras segundos atrás,

El día empezó como era de esperarse, la tensión y el sentimiento estaba a flor de piel, recuerdo que baje a correr unos minutos antes de las cinco de la mañana, se que prendí la televisión y estaban las olimpiadas, pero para decir verdad, no recuerdo que es lo que vi, mi mente estaba tan enfocada en molestar a mis mas íntimos fantasmas, que ni siquiera puedo recordar lo que estaban transmitiendo en ese momento, hasta que mas o menos después de correr unos 4 kilómetros se me doblaron las piernas y me solté a llorar, vaya, que digo llorar, estaba desatado, parecía niño haciendo berrinche en tienda departamental gringa, por suerte no llego ningún vecino, seguramente me hubieran corrido del edificio, del comité de vigilancia y me hubieran mandado una vez mas a terapia. No se que me paso, pero en ese momento perdí absolutamente todo el control de mi  mismo.

Después el día camino de la misma manera, a las 11:30 se llevaron a mi chaparra, la despedida fue muy difícil, pero el tiempo siguió caminando, aunque esta vez los relojes se comportaban muy raro, aunque la sensación era de que habían transcurrido un par de horas, las manecillas solo habían avanzado 5 minutos.

A las 12:37, me marco uno de los médicos para avisarme que la cirugía había comenzado 12:30 en punto y exactamente a las 14:57 recibí otra llamada, esta vez me notificaron que ya había terminado la operación, que todo estaba bien y que bajara por favor a platicar con el medico encargado, baje mas rápido que una gorda en tobogán, al verlo me comento los detalles de la cirugía, todo bajo control, veo a mi chaparra a través de una ventana del quirófano, la veo dormida conectada con muchos cables y con algunos médicos aun trabajando en ella, le logro decir "Hola Baby", se le abren sus ojos y me sonríe y me dice como estas?, le respondo "Muy bien chaparra, tu como te sientes ? " ella, sin mas ni menos me dice:

Ves......no me morí!

En ese momento no dejamos de reírnos. (pinché loca)

Mi chaparra había regresado!

Subo de regreso al cuarto para hablar con la familia y amigos para comunicarles los detalles.

La tarde sigue su curso, cambiamos de cuarto a terapia media, mi chaparra empieza a estar mas despierta y el tiempo empieza a caminar con mejor ritmo.

Yo a partir de ese momento empecé a sentir como el cuerpo se me desdoblaba, los brazos se volvían a mover, al espalda dejaba de parecer signo de interrogación y mis hombros dejan de cargar al cielo entero, me empieza a invadir un cansancio que hace mucho no sentía, mis ojos vuelven a distinguir los colores y mis oídos vuelve a distinguir el tono de voz de las personas. En verdad no puedo explicarles el sentimiento, parece que me quitaron el freno de mano de la vida, es un sentimiento de agotamiento, es algo así como un cansancio, mas bien como un cansancio muy rico.

Se que aun no es la solución definitiva, se que este maratón todavía no termina, inclusivo reconozco que no sabemos cual será el verdadero resultado de esta operación, pero lo que si sabemos es que fue un gran paso, fue un gran acierto y sobretodo fue una gran liberación de un enorme peso en nuestras vidas, aun no sabemos cuales sean los siguientes pasos a seguir, pero lo que me deja mas tranquilo es que este paso que dimos, fue un éxito.

Hoy dormiré una noche tranquilo, con sueños reparadores y sin insomnio.

Hoy dimos un gran paso hacia la felicidad, hoy soy mejor persona que ayer y hoy entendí un poco mas de lo importante que es vivir la vida.

Live, Love, Laugh.