Estoy enojado.

Escribir el día de hoy es muy fácil, tengo tan claro lo que siento, que las palabras me sobran.

Estoy enojado, con todo, no puedo entender por que simplemente no podemos avanzar en este maratón de una manera mas fácil.

El día de hoy después de una cita con uno de los médicos se llego a una nueva conclusión:

YA NO HAY MUCHO QUE HACER POR SU DESHIDRATACION, MAS QUE PONERLE UN CATÉTER CENTRAL PERMANENTE PARA HIDRATARLA CUANDO SEA NECESARIO, esto solo si todos los demás médicos tratantes lo autorizan.

QUE, QUE ?

Esto, fue después de constatar que su cuerpo ya no esta absorbiendo liquido alguno.

Ahora , mi chaparra, además de tener su famosa pila, va a tener un pinche tubo toda su vida conectado directo a una vena central para que cuando este muy deshidratada, la hidraten.

No es ya ridículo esto, que mas quiere la vida de ella?

No pueden ya dejarla estable por un tiempo, apenas salimos del hospital hace 15 días, en un intento fallido por hacer que genere músculo y ahora esto?

Ya no se que pensar, ya no se que hacer, ya no se como decirle que todo estará bien, si hasta yo mismo empiezo a dudarlo.

Hoy no se que sentimiento es mas fuerte, si el enojo o el miedo? o acaso será que el enojo es un mecanismo de defensa contra el miedo?

Pero como puedo pensar no sentirlo, si la imagen de ese famoso y estúpido cerillo que se va consumiendo, no puedo sacarla de mi mente, cada paso que damos para adelante, nos manda cinco pasos hacia atrás.

Ya tiene un marcapasos, ya toma 50 pastillas al día, ya no tiene casi masa muscular, ya no va a poder hacer ejercicio nunca mas, ya casi no salimos en las noches, todo lo que hacemos, tiene que ser planeado, y ahora le van a poner un mega popote para siempre?

Ya no se si llorar, reírme o seguir enojado?

No puedo seguir viendo como mi chaparra se va consumiendo por dentro, se que si algún día algo le llega a pasar, el único que se va a quedar solo como idiota en este mundo soy yo, razón por la cual, no me puedo rendir, tengo que seguir empujando, luchando y corriendo hasta que ella salga adelante, muchas veces siento que no avanzamos, pero aun así tengo que seguir empujando.

No se me espanten, todos tenemos derecho a estar enojados en algún momento, hoy me toco a mi.

Pero este miedo disfrazado de enojo, no hará que dejemos de seguir luchando, la vida es solo una, y como les he dicho antes, YO NO ME RINDO, seguiré haciendo todo lo necesario para que mi chaparra salga adelante como siempre.

No podemos controlar lo que pase mañana, pero si podemos decidir como vivirlo hoy.