El Maratón de la Autoinmunidad

Ya pasamos el aniversario de la ultima vez que mi chiquita corrió, ya estamos a pocos días de volver a Rochester MN, para que la operen y esperemos en D´s esta sea la definitiva y así, nuestra vida pueda volver a la normalidad! Normalidad, ya no lo se, ya no recuerdo cuando fue la ultima vez en mi vida que no estaba preocupado,  o cuando fue la ultima vez que no me importo que se despertara en la noche o que dormí una noche seguida realmente descansando, para serles sincero, hay momentos que no distingo si esto es la realidad o un sueño, ya llevamos tanto tiempo en esto que no se en que momento va a terminar, lo que si puedo decirles es que extraño tanto salir en las noches, antes mi papa siempre se burlaba de nosotros por que salíamos todas las noches, los jueves de whisky eran lo mejor que tenia en mi semana, las idas al cine sin importar el horario de la función ya son cosa del pasado y bueno, que puedo decirles de nuestras cenas de novios, cuando nos terminábamos una

Como ya leyeron, el día de ayer ingresamos al hospital por que mi chiquita estaba muy deshidratada, acá seguimos, pero hay momentos que no puedo dejar de recordar y de contarles por la admiración que me causan. Mi chiquita llego al hospital sintiéndose muy mal, no podía hablar mucho, tenia temblorina, sudoraciones, fuerte dolor de cabeza, entre otras cosas, la canalizaron y le suministraron varias cosas para que esto mejore, cosa que si sucedió bastante rápido afortunadamente, pero en el momento que ella empezó a mejorar y a incorporarse, lo primero que hizo fue: Agarrar su celular, marcar unos numero y decir, lo molletes, los chilaquiles y todo, debe quedar perfecto a las 11:30, por que lo que mas le preocupaba es un evento que tiene que entregar hoy para mas de 100 personas. Durante el día, siguieron mas llamadas de trabajo, no le importo que estaba conectada al suero, tenia los cables de oxigeno conectados, le estaban tomando muestras de sangre y ella, en el teléfono traba

Cuando vas a media carrera, no importan si es el kilómetro 12, el kilómetro 22 o el kilómetro 32,  pasas cerca de la valla y una persona desconocida te dice "CHOCALAS" es de mucha ayuda, son esas pequeñas cosas que para serles muy sinceros ayudan mucho, te dan energía y te sacan una sonrisa! En este Marathon, es exactamente lo mismo,  ahora imagínense el efecto que tiene ese "CHOCALAS" de gente que si conoces, de gente que quieres, es increíble. El día de ayer, volvimos al hospital, por una deshidratación severa, todo indica que es parte de lo mismo, pero bueno, eso no es lo relevante de esta entrada. Lo que quiero decirles es que el día de ayer no fue la excepción, que estando en la sala de urgencias, pasando las mismas puertas de vidrio que ya hasta me saludan, estaba la gente que siempre espera a que yo salga y en el momento que lo hago, me dicen "CHOCALAS" y así es, es ese pequeño momento que me da fuerza, energía, esper

En todo Marathon, hay una parte en la que el cuerpo sigue su ritmo solo, a pesar de estar cansado, la mente empieza a disfrutar el panorama, los ojos buscan elementos agradables, realmente en ese momento la mente deja de sufrir. Con respecto al Marathon del POTS puedo decirles que estamos en ese momento, como saben hemos tenido momentos muy complicados, hoy por hoy no sabemos que tan cerca estamos de la meta, una posible cirujia es casi inminente y mas después de lo ocurrido la semana pasada. Puedo decirles que hemos aprendido tantas cosas, que de no ser por esta situación, no se si las hubiéramos aprendido algún día. Como es el caso de aprender a disfrutar cada momento que tenemos, no se imaginan como valoramos el estar juntos, el estar tranquilos, el estar simplemente en la casa con mis 3 remolinos, o el simplemente estar algunos días sin ninguna crisis o situación complicada. El día de hoy planeamos tanto las salidas que tenemos como pareja, que el simplemente hecho de ir por un