Bitácora de viaje, Día 12 por MB
Empieza la semana, estamos en la víspera del tan esperado día de la cirugía. Sin horario asignado, éste no lo sabremos hasta hoy a las 8:15 de la noche, así es esto, hasta para el horario hay que esperar, como si D y J no hubieran esperado suficiente.
Hoy D tiene que ver al nefrologo, pero una vez más habrá que esperar. No tiene cita con él y le piden que deje su teléfono para que le avisen la hora de la cita. Mientras lo integrantes del "Team Denisse" siguen llegando. Ayer llegó D el hermano de J, y en vista de que tendrían unas horas libres decidieron salir a hacer unas compras al Target y al Best Buy, muy contentos en el coche todos los K emprendieron camino cuando sonó el teléfono y de la oficina del nefrologo les pidieron que volvieran y que debían esperar ahí. Claro que nunca pensaron que la espera sería tan larga como fue, atrapados en la sala de espera, sin escapatoria posible, las horas pasaron de las 11 a las 12, de las 12 a la 1...hasta las 3 de la tarde!
El nefrologo los recibió por fin y fue muy entusiasta al recibirlos, es "un caso especial y complicado" y que lo diga...así se suma un Dr. más a la larga lista de los que han visto a D, cada uno revisa su caso que ya cuenta con una larga historia clínica que se presenta como un reto para cada uno de los valientes que la han tratado.
El resultado de esta cita es bastante parecido a lo que D ya sabía por su nefrologo en México, su tema de la diabetes insípida y la insuficiencia de las suprarrenales es algo que se deberá seguir tratando y controlando aún después de la cirugía, aunque su mejoría en el control de su frecuencia cardíaca se traducirá en una gran mejoría general. Una vez controlado su acelerado corazón, tendrán mucho margen para poder darle un tratamiento mucho más efectivo en este aspecto.
Mientras esto sucedía, otros miembros del Team viajaban para estar presentes en la cirugía, entre ellos su servidora y el papá de D.
Una vez reunidos, fuimos todos a cenar al ya conocido restaurante griego frente al hotel. Mi reencuentro con D y J fue de gran alegría, como si nos hubiéramos dejado de ver un largo tiempo, ellos ya sienten que llevan aquí una eternidad... Y en parte así es, J contó que es la 22ava noche que pasan en Rochester contando los días que estuvieron en Abril.
"Party of 6" para cenar en el griego. El hambre y las prisas por ordenar, no fueron nuestras mejores aliadas, ya que cuando empezaron a llegar los platos creo batimos el récord de la mesa que ha ordenado más humus en una sola cena!.
Casi con grúa después de lo que comimos, logramos levantarnos de la mesa para ir por un café al Barnes & Noble de enfrente y tratar de matar el tiempo hasta las 8:15, hora en que J y D tendrían que llamar para conocer la hora de la cirugía.
Tic tac, tic tac...llego la hora, J se comunicó al teléfono que venía en el brochure específico de cirugía. Una grabadora le informó que debía presentarse mañana a las 6:30 am en el Saint Marys Hospital. Caras de júbilo, que pronto pasaron al nerviosismo y ansiedad.
El procedimiento debe durar aproximadamente 2 horas, en las que el Dr. Deschamps quitará el ganglio estelar y una parte del nervio simpático (sin quitarle a D ni un gramo de su excelente sentido del humor ni simpatía) sólo hará que su apresurado corazón deje de correr a esa velocidad y le de tregua para seguir disfrutando de la vida, de su familia y de todos los que tenemos la suerte de estar cerca de ella.
Team D local y foráneo,llegó el momento de la verdad. No se me distraigan y recen todo lo que se sepan y manden todas las buenas vibras para que J y D lleguen a la meta de este largo marathon con todo y porra.
Hoy D tiene que ver al nefrologo, pero una vez más habrá que esperar. No tiene cita con él y le piden que deje su teléfono para que le avisen la hora de la cita. Mientras lo integrantes del "Team Denisse" siguen llegando. Ayer llegó D el hermano de J, y en vista de que tendrían unas horas libres decidieron salir a hacer unas compras al Target y al Best Buy, muy contentos en el coche todos los K emprendieron camino cuando sonó el teléfono y de la oficina del nefrologo les pidieron que volvieran y que debían esperar ahí. Claro que nunca pensaron que la espera sería tan larga como fue, atrapados en la sala de espera, sin escapatoria posible, las horas pasaron de las 11 a las 12, de las 12 a la 1...hasta las 3 de la tarde!
El nefrologo los recibió por fin y fue muy entusiasta al recibirlos, es "un caso especial y complicado" y que lo diga...así se suma un Dr. más a la larga lista de los que han visto a D, cada uno revisa su caso que ya cuenta con una larga historia clínica que se presenta como un reto para cada uno de los valientes que la han tratado.
El resultado de esta cita es bastante parecido a lo que D ya sabía por su nefrologo en México, su tema de la diabetes insípida y la insuficiencia de las suprarrenales es algo que se deberá seguir tratando y controlando aún después de la cirugía, aunque su mejoría en el control de su frecuencia cardíaca se traducirá en una gran mejoría general. Una vez controlado su acelerado corazón, tendrán mucho margen para poder darle un tratamiento mucho más efectivo en este aspecto.
Mientras esto sucedía, otros miembros del Team viajaban para estar presentes en la cirugía, entre ellos su servidora y el papá de D.
Una vez reunidos, fuimos todos a cenar al ya conocido restaurante griego frente al hotel. Mi reencuentro con D y J fue de gran alegría, como si nos hubiéramos dejado de ver un largo tiempo, ellos ya sienten que llevan aquí una eternidad... Y en parte así es, J contó que es la 22ava noche que pasan en Rochester contando los días que estuvieron en Abril.
"Party of 6" para cenar en el griego. El hambre y las prisas por ordenar, no fueron nuestras mejores aliadas, ya que cuando empezaron a llegar los platos creo batimos el récord de la mesa que ha ordenado más humus en una sola cena!.
Casi con grúa después de lo que comimos, logramos levantarnos de la mesa para ir por un café al Barnes & Noble de enfrente y tratar de matar el tiempo hasta las 8:15, hora en que J y D tendrían que llamar para conocer la hora de la cirugía.
Tic tac, tic tac...llego la hora, J se comunicó al teléfono que venía en el brochure específico de cirugía. Una grabadora le informó que debía presentarse mañana a las 6:30 am en el Saint Marys Hospital. Caras de júbilo, que pronto pasaron al nerviosismo y ansiedad.
El procedimiento debe durar aproximadamente 2 horas, en las que el Dr. Deschamps quitará el ganglio estelar y una parte del nervio simpático (sin quitarle a D ni un gramo de su excelente sentido del humor ni simpatía) sólo hará que su apresurado corazón deje de correr a esa velocidad y le de tregua para seguir disfrutando de la vida, de su familia y de todos los que tenemos la suerte de estar cerca de ella.
Team D local y foráneo,llegó el momento de la verdad. No se me distraigan y recen todo lo que se sepan y manden todas las buenas vibras para que J y D lleguen a la meta de este largo marathon con todo y porra.
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