¡Imagina tu vida!

Imagina tu vida sin poder planear más allá de 21 días.

Imagina tu vida con un constante miedo a perderla.

Imagina tu vida como si fueras un malabarista y no tienes posibilidad alguna de equivocarte.

Imagína tu vida necesitando administrar tus fuerzas para no perderlas en batallas absurdas.

Imagina tu vida teniendo que pensar cada paso que das, para no dar ningún en falso.

Imagina tu vida sin saber cómo será tu futuro.

Imagina tu vida en la que tus fuerzas se terminan a las 21:00 todos los días.

Imagina tu vida pensando muy bien cada cosa que vas a hacer, antes de hacerla.

Imagina tu vida, rodeado de gente que te demuestra a diario lo mucho que te quiere, admira y respeta.

Imagina tu vida sin tener que preocuparte  tanto por el futuro.

Imagina tu vida como si la vivieras sólo para ser feliz.

Imagina tu vida teniendo junto ti solamente a la gente que realmente aporta algo a tu corazón.

Imagina tu vida viviéndola para ti.

Imagina tu vida platicando contigo todos los días.

Imagina tu vida sabiendo que hoy, estás mejor que mañana.

Imagina tu vida al lado de tu más grande inspiración.

Imagina tu vida sin tener tiempo para pensar tonterías.

Imagina tu vida viviéndola sin poder imaginarla.

Conocen la frase:

          ¡Vive, como si hoy fuera el último día de tu vida! 

o esta otra:

          ¡Vive, como si hoy empezaras a vivir el resto de tu vida!

Ahora...Imagina que eso fuera probable? O que alguna de estas dos frases fuera verdad.

Estarías haciendo lo mismo que haces hoy todos los días? 
Tendrías la misma relación con las personas que te rodean? 
Tendrías la misma relación contigo mismo? 
Volverías a empezar? 
Dejarías de hacer algo? 
Qué cambiarías en tu vida? 

En la vida, nos pasamos haciendo planes, pero pocas veces nos preocupamos por ejecutarlos.

A nosotros, este maratón nos obligó a dejar de imaginar y empezar a vivir. 

Fue increíble!

A nosotros la vida nos puso en una situación que nunca imaginamos estar, tampoco sabemos cuánto tiempo más estaremos juntos, pero son justo estas situaciones en la vida las que te hacen despertar, abrir los ojos y aprender a pensar con el corazón.

Y para terminar, sólo les digo...

Vivan, sonrian y sean felices, todo lo demás es secundario.

No esperen que algo suceda para despertar, no se compliquen la vida peleando batallas absurdas, sean felices por ustedes mismo y  por los seres que aman.

Créanme... Si yo hubiera entendido esto antes de este maratón, hubiera hecho las cosas de otra manera, uno no debe esperarse que la vida nos orille a tomar decisiones basadas en ser felices...

Decide hoy ser feliz! 

Por qué aún en momentos de tormenta, existen razones para sonreír.


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