La paradoja del amor! ( No es cursi)

Como dice el título:

La Paradoja del amor, es algo que vivimos todos los días, pero entre más avanzamos, más crecemos y por ende, nos damos cuenta de algunas cosas que antes no veíamos o por lo menos no las veíamos de la misma manera.

Saben ustedes el daño que se le puede hacer alguien al sobre protegerla? Y no me refiero a la educación de los hijos, por que eso... seguramente es otro tema mucho más complejo, el cual no tiene nada que ver en este blog y yo mucho menos puedo hablar de él, así que hablemos de la situación que nosotros estamos viviendo en este maratón. 

Pero para hacerles el cuento un poco más corto, solo les puedo decir que yo al sobrereproteger a mi chaparra en estos últimos 7 años, también la he perjudicado.

Ojo, esto no lo digo como mártir, golpes de pecho, ni mucho menos jugando a la víctima, por que puedo ser muchas cosas en mi vida, pero lo que NUNCA seré, es víctima, eso se lo dejo a otras personas que no vienen al caso. 

El tema es que estos últimos días, me di cuenta que al querer proteger  a mi chaparra, también le he hecho daño. 

Por ejemplo:

Yo quiero evitar que cargue su bolsa para que no se canse, pero para ella el no sentirse autosuficiente le hace más daño.

No quiero que haga algunas cosas básicas con mis hijos, cómo ir a una excursión del colegio, cuando para ella no hacerlo es hacerla sentir como una mamá no presente.

No quiero que se hecha un mezcal de más, por que se puede deshidratar más y ya sabemos lo que pasa, pero para ella, el dejase ir y disfrutar el momento, tiene mucho significado que el no hacerlo.

No me gusta dejarla sola en México cuando tengo que salir de viaje por motivos de trabajo, por el cansancio que esto puede representar en ella, pero para ella, quedarse sola y delatarle al mundo que puede con todo sola, le es  mucho más importante que el cansancio que puede acumular en unos días.

Y así... hay tantas situaciones que vivimos, que yo quiero controlar para que ella no se vea afectada, pero al hacerlo le evito vivir esos momentos que le aportan más a su vida de lo que le restan las repercusiones fuera de mi control.

Así que les digo algo...

Tengo que dejarla vivir, tengo que dejarla ser mamá, amiga, hermana, esposa, hija y todos los papeles que ella debe jugar al 100% aún y cuando se que el hacerlos, representan un desgaste que me encantaría evitar. Y esto... lo hago con nerviosismo y hasta con un poco me miedo, pero la neta... tengo que dejarla vivir la vida como ella la quiera vivir. Por qué al fin y al cabo, no debo olvidar que es SU vida y mi deber como esposo, amigo, compañero y cómplice, no es amarrarle las alas para que no vuele, sino ayudarle a volar más alto y si se llega a caer, estar ahí para levantarla.

Gracias una vez más por leerme y gracias por todos sus comentarios, gracis por sus mensajes y gracias por todos sus buenos deseos.

Live, Love, Laugh and Fly away.